
¡Atención, tortolitos! El verano es básicamente la forma en que la naturaleza nos dice: *¡ Vayan a ser asquerosamente monos en algún lugar pintoresco !* Ya sea que estén paseando de la mano por campos de lavanda, robando besos al atardecer o recreando dramáticamente *El diario de Noa* en una playa solitaria, su vestuario para escapadas debe ser tan de ensueño como sus pies de foto de Instagram. Aquí tienen la guía definitiva de destinos románticos y los conjuntos que les harán parecer como si hubieran entrado directamente en una comedia romántica (sin la incómoda ruptura del tercer acto).
Santorini, Grecia
El ambiente : acantilados encalados, cúpulas de color cobalto y suficiente luz dorada para que incluso tus selfies en el aeropuerto parezcan poéticas.
Qué ponerse:
Para ella: Un vestido largo fluido con hombros descubiertos en tonos atardecer (óxido, rubor o azul egeo) + sandalias con tiras + un sombrero de paja lo suficientemente grande para ocultar tu cara de “acabo de tener una discusión sobre las direcciones”.
Para él: Pantalones de lino que digan *“Lo intenté, pero no demasiado”* + una camisa fresca y desabrochada + gafas de sol que él insistirá en que “tomes prestadas” pero que nunca recuperarás.
Consejo profesional: Empaca una paleta que combine pero no que combine (por ejemplo, su vestido color durazno + su camisa azul marino) para fotos de pareja que griten " somos elegantes, no básicos".
Costa Amalfitana, Italia
El ambiente: limoneros, aperitivos al borde del acantilado y muestras de afecto tan excesivas que hasta los italianos te mirarán de reojo.
Qué ponerse:
Para ella: Un vestido cruzado con estampados cítricos (limones = siempre un sí) + sandalias de tacón bloque (los adoquines son enemigos de los stilettos) + un clutch de rafia para un estilo *la dolce vita*.
Para él: pantalones cortos a medida + un polo impecable (sin arrugas, porque nada mata el romance como planchar en vacaciones) + mocasines (sin calcetines, monstruo).
Consejo profesional: Camisas de lino para él y para ella atadas sobre los trajes de baño = energía instantánea de *we yacht* (incluso si su bote es un pedaló de 20 €).
Kioto, Japón (temporada baja de floración de los cerezos)
El ambiente: bosques de bambú, templos serenos y selfies de parejas tan estéticas que harán que tus amigos en casa se pongan furiosos.
Qué ponerse:
Para ella: Una falda midi con flores delicadas + una blusa por dentro del pantalón + zapatos para caminar *realmente* cómodos (sacrificar el "fit" por 10.000 pasos al día).
Para él: pantalones cónicos relajados + una camiseta minimalista + una camisa liviana para usar en capas sin sudar durante el romance.
Consejo profesional: tonos neutros con un toque de color a juego (por ejemplo, ambos con detalles en rosa suave) = coordinación de siguiente nivel sin resultar incómodo.
Tulum, México
El ambiente: clubes de playa con aires de jungla, baños en cenotes y suficiente agua de coco para hidratar todo el bagaje emocional de la relación.
Qué ponerse:
Para ella: Un bikini de crochet (casi imperceptible, pero aún así ~misterioso~) + braguita de bikini de cintura alta + tobilleras doradas para una energía de *“Me desperté así”*.
Para él: bañador que no sea del 2012 + una camiseta sin mangas ajustada (o ve sin camisa, no te juzgamos) + un collar de cordón de cuero para darle un toque ~edge~.
Consejo profesional: Tatuajes de henna para él y para ella (¡temporales!): lindos para las fotos, sin compromiso, tal como su estado civil antes del viaje.
Las reglas de oro para preparar el equipaje en pareja:
1. Comparte una maleta (si te atreves): te obliga a editar solo los atuendos que realmente usarás (QEPD esos tacones "por si acaso").
2. Primero el calzado: Las ampollas son el mayor destructor de romances. Empaca *un* par elegante y vive en sandalias/zapatillas.
3. Ponte capas como si estuvieras en una canción de Taylor Swift: bufandas livianas, camisas desabotonadas y vestidos convertibles = transiciones sin esfuerzo del día a la noche.
¿El secreto de una escapada romántica? Atuendos que se vean bien *y* se sientan bien (porque nada arruina el ambiente como decir "cariño, me duelen los pies"). Ahora, vete, viaja ligero y ponles celos a tus amigos, preferiblemente mientras disfrutas de algo espumoso con dos pajitas.